Presuntos integrantes de grupos de la delincuencia organizada han desatado una ola de violencia en el municipio de Frontera Comalapa, Chiapas, y los límites con Guatemala, generando enfrentamientos a balazos y bloqueos intermitentes en la zona. Los pobladores informaron que esta situación se debe a la disputa por el control territorial entre diferentes carteles.
Uno de los puntos más críticos se encuentra en la localidad de Nueva Independencia, conocida como Lajerío, donde los habitantes han relatado momentos de temor y peligro. Durante la tarde y noche de ayer, hombres residentes en la zona huyeron hacia el monte o a la ribera de un río, ya que uno de los carteles está reclutando a personas de la comunidad. Según los testimonios, sujetos armados y encapuchados están en el centro de la comunidad, esperando la noche para sacar a los hombres y llevarlos consigo. Como resultado, la mayoría de las aproximadamente 200 casas en Lajerío se encuentran vacías.
Los pobladores denuncian que la falta de presencia de fuerzas de seguridad pública en el área los deja indefensos frente a esta situación. La ausencia de clases y la suspensión de actividades en Frontera Comalapa han generado un ambiente de miedo y desolación. Los habitantes demandan que las autoridades den la cara y tomen medidas para garantizar su seguridad.
Los afectados también han reportado bloqueos en diferentes localidades, como Pacayalito, en dirección al municipio de Motozintla, y en el ejido Tres Maravillas, con dirección a Chicomuselo. Además, se han registrado refriegas en la Sabinada, del lado de Guadalupe Grijalva, así como en los desvíos de Nuevo México, Santa Rita y Paso Hondo, cercanos a la frontera con Guatemala y en dirección a Comitán.
En otros municipios de la región, como Mazapa de Madero y Chicomuselo, la situación también es tensa. Se han reportado tiroteos, quema de vehículos y bloqueos que han paralizado las actividades cotidianas. La presencia de narcomantas y la retención de personas, como el activista Fredy Milton Morales Zunun, han generado un clima de preocupación en la zona.
Ante esta situación, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ha solicitado a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana estatal implementar medidas cautelares en el ejido Nuevo Morelia, en Chicomuselo, donde presuntos trabajadores de una empresa, respaldados por hombres armados, han estado extrayendo barita de una mina.
En este contexto, el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas ha dirigido una petición al presidente Andrés Manuel López Obrador para que se garantice de manera urgente la vida, seguridad e integridad física y psicológica de los habitantes de la región Moisés y Gandhi, perteneciente al caracol 10, donde recientemente resultó herido de bala Gilberto López Sántiz, base de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
La situación en Frontera Comalapa y sus alrededores continúa siendo preocupante, y se espera una pronta intervención de las autoridades para restablecer el orden y brindar seguridad a la población afectada por esta disputa territorial entre grupos de la delincuencia organizada.
