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Emma Coronel, esposa de «El Chapo» Guzmán, cumple las últimas semanas de su condena en casa de transición en California

Emma Coronel, esposa de Joaquín «El Chapo» Guzmán, ha sido trasladada a una casa de transición en California o a un domicilio particular en Los Ángeles para cumplir las últimas semanas de su sentencia por participar en actividades de narcotráfico y lavado de dinero para el Cártel de Sinaloa.

Según el vocero del Federal Medical Center (FMC) Carswell, Donald Murphy, Coronel fue reubicada el pasado 30 de mayo a confinamiento comunitario supervisado por la Oficina de Administración de Residencias de Reingreso (RRM) en Long Beach del Buró Federal de Prisiones (BOP). Esta información fue obtenida por el medio Univision.

Ante las preguntas del medio, Murphy explicó que a la acusada se le ofrecieron dos opciones para el periodo final de su condena: cumplir prisión domiciliaria o acudir a una casa de transición. Aunque no se especificó cuál opción eligió, por razones de privacidad, se adelantó que una vez completado este proceso, podría obtener su libertad el próximo 13 de septiembre, como lo anunció el BOP en febrero después de que el gobierno de Estados Unidos redujera su condena de 36 a 31 meses.

Coronel se declaró culpable en junio de 2021 de ayudar a su esposo en operaciones de tráfico de estupefacientes y fue condenada a prisión en noviembre de ese mismo año, quedando bajo custodia de la Agencia Federal de Prisiones de Estados Unidos. Además, fue acusada de ayudar a su marido a escapar de la cárcel de máxima seguridad del Altiplano en 2015.

Como parte del proceso de «reinserción social» estipulado en el programa de casas intermedias o de transición, Coronel ahora tiene derecho a salir a trabajar, tomar clases, acudir a rehabilitación o terapia, e incluso retomar sus redes sociales. Según Univisión, el objetivo de estos sitios es que las personas reubicadas mantengan o reconstruyan los lazos con la comunidad para evitar la reincidencia.

El portal Prison Policy Initiative señala que las personas reubicadas en casas intermedias viven en un entorno grupal bajo un conjunto de reglas y requisitos que incluyen la asistencia a programas, toques de queda y mantener un empleo.

Este traslado de Emma Coronel ha generado controversia y reavivado el debate sobre las implicaciones y consecuencias del narcotráfico en la sociedad y la eficacia de los programas de reinserción social en casos de alto perfil.

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