Fuertes lluvias dejan a miles de asistentes de Burning Man varados en el desierto de Nevada
El famoso festival Burning Man, que cada año atrae a decenas de miles de personas al desierto de Nevada, en Estados Unidos, se ha visto empañado por un inusual evento climático que ha dejado a miles de asistentes varados en la zona. Fuertes lluvias han convertido el terreno en barro, dificultando la movilidad y generando preocupación entre los participantes.
A través de la red social X (anteriormente conocida como Twitter), los organizadores del evento emitieron una serie de mensajes en los que informaron sobre el cierre de los accesos a la zona y aconsejaron a los asistentes conservar agua y alimentos. «Si os encontráis en Black Rock City (el nombre de la ciudad temporal que se construye cada año durante el festival), por favor, quedaos donde estáis y manteneos a salvo», instaron.
La situación en el lugar se ha vuelto complicada, con la arena transformada en un lodo que alcanza a los tobillos. Algunos asistentes han intentado atravesar el barro en bicicleta, pero se han quedado atascados, según informó una participante a la cadena CNN.
El servicio estadounidense de meteorología emitió un aviso indicando que se esperan más lluvias y tormentas durante el domingo, lo que agrega incertidumbre a la situación en Burning Man.
El festival Burning Man es conocido por su ubicación en un lago seco en el desierto de Nevada, donde se erige una ciudad temporal accesible a través de una autopista de dos carriles. Durante el evento, los asistentes pueden participar en una amplia gama de actividades artísticas y comunitarias. Los principios que guían el festival incluyen la «responsabilidad civil», la «expresión radical» y el «no dejar rastros». Un aspecto distintivo es que no se permite el uso de dinero en el festival, aunque las entradas para asistir cuestan cientos de dólares.
