«La dama del silencio: el caso Mataviejitas» llega a Netflix: un inquietante relato de true crime en México
El catálogo de Netflix se enriquece una vez más con una historia de true crime que promete mantener a los espectadores al borde de sus asientos. En esta ocasión, la plataforma de streaming nos traslada a México para ahondar en uno de los casos más oscuros y perturbadores que han sacudido las páginas policiales. La película documental «La dama del silencio: el caso Mataviejitas», dirigida por Maria José Cueva, se adentra en la vida y delitos de Juana Barraza, una mujer que fue sentenciada a una pena de 759 años de prisión tras ser acusada de asesinar a 16 personas.
La trama nos remonta a mediados de los años 90, cuando la capital mexicana se convirtió en el escenario de una serie de atroces asesinatos que dejaron a la sociedad en vilo. Todas las víctimas, mujeres de la tercera edad, fueron halladas sin vida en sus hogares, presentando signos de estrangulamiento y con objetos de valor desaparecidos. La naturaleza sistemática de estos crímenes llevó a las autoridades a considerar la posibilidad de enfrentarse a un asesino en serie.
El documental se adentra en la figura de Juana Barraza, conocida como «La dama del silencio», quien previamente había incursionado en el mundo de la lucha libre femenina. Este deporte fue su refugio tras una infancia difícil, pero una lesión truncó su carrera en el ring. En 2006, la mujer fue detenida por la policía al comprobarse su presunta implicación en una serie de muertes ocurridas entre 1998 y 2005.
Los registros periodísticos de la época describen su modus operandi. Barraza seleccionaba a mujeres mayores en situación de vulnerabilidad como sus víctimas. Haciéndose pasar por enfermera o trabajadora social, ganaba su confianza y obtenía acceso a sus viviendas. Luego, empleaba técnicas de asfixia que había aprendido durante su tiempo como luchadora amateur para arrebatarles la vida.
Juana fue llevada a juicio en 2008 y condenada inicialmente a 759 años de prisión, una sentencia que posteriormente fue reducida a 50. Durante el proceso, declaró el motivo aparente de su ensañamiento con las señoras de la tercera edad.
