En un movimiento que ha captado la atención de la opinión pública, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo una reunión esta tarde en Palacio Nacional con el empresario magnate Carlos Slim. Este encuentro toma lugar en un momento estratégico, a tan solo un día antes de las importantes conversaciones de seguridad de alto nivel entre México y Estados Unidos, donde se espera la participación de funcionarios clave, como el secretario de estado de EE. UU., Antony Blinken, y el fiscal Merrick Garland.
El presidente vitalicio de Grupo Carso llegó al estacionamiento del recinto histórico minutos antes de las 14:30 horas, rodeado de un dispositivo de seguridad poco común. A su lado, al volante del vehículo, se encontraba su hijo, Carlos Slim Dommit, mientras que en la parte trasera viajaba Bernardo Gómez, director ejecutivo de Televisa.
Este encuentro cobra aún más relevancia al situarse en el contexto de la próxima visita del presidente López Obrador al sureste, donde realizará su segundo recorrido por el Tren Maya, un proyecto emblemático de su administración.
No es la primera vez que el empresario Carlos Slim se reúne con el presidente; la última ocasión fue en agosto de 2023, justo antes del primer recorrido a bordo del Tren Maya. La relación entre el mandatario y el magnate ha sido objeto de interés, especialmente en momentos clave para el desarrollo del país.
Mientras la prensa especula sobre la posible conexión entre este encuentro y las conversaciones de seguridad con Estados Unidos, se espera que la reunión arroje luz sobre las áreas de colaboración entre el gobierno y el sector empresarial en temas cruciales para la estabilidad y desarrollo de México. La presencia de Bernardo Gómez, director ejecutivo de Televisa, añade un elemento adicional de interés, sugiriendo la posibilidad de discutir no solo temas económicos sino también asuntos relacionados con los medios de comunicación en el país.
